Más de un centenar de inscritos en la jornada sobre innovación en los medios de producción en agricultura del Colegio que ha analizado las innovaciones en la utilización de máquinas más eficientes, el desarrollo de material vegetal más productivo y seguro, y las nuevas tendencias para una fertilización sostenible.
Las nuevas tecnologías se presentan como las principales aliadas del sector agroalimentario, ya que permiten la reducción de los costes, el incremento de la producción y la minimización de los riesgos para la seguridad alimentaria y el medioambiente.
Así se puso de manifiesto en la jornada que el grupo de trabajo "Jóvenes ingenieros, emprendimiento e innovación" del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Centro y Canarias, en colaboración con la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos y el Instituto de la Ingeniería de España, organizó el 15 de junio.
La jornada, que también pudo seguirse a través del canal de Youtube del Instituto de la Ingeniería, se centró en los avances que ya se están alcanzando en innovación agraria y alimentaria, y los que vendrán en los próximos años, así como en las herramientas con las que contarán los ingenieros agrónomos y el resto de profesionales del sector agroalimentario para suministrar a los consumidores alimentos suficientes, de calidad y saludables, obtenidos mediante procedimientos medioambientalmente responsables.
Isabel Rocafull, service regional manager de Kubota, repasó con algunos ejemplos las nuevas innovaciones de Kubota, la multinacional japonesa en agricultura de precisión y maquinaria agrícola: autoguiado, diagnóstico remoto y telemetría, software de gestión integral, control mediante implemento, tractores y segadoras eléctricas y máquinas autónomas, como pueden ser la maquinaria de recolección (drones, robots, etc.) o de aplicación de tratamientos fitosanitarios.
Según Rocafull, el contexto actual “nos lleva a la necesidad de aumentar la productividad en las zonas ya desarrolladas y donde tenemos menos campo cultivable para poder seguir alimentando a la gente.
Antonio Villarroel, secretario general de la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (ANOVE), explicó los beneficios de la innovación en el ámbito de la mejora vegetal, entre los que se encuentran su potencial de acelerar enormemente los procesos de mejora, de forma más precisa, eficiente y segura que los procedimientos convencionales, y la obtención de plantas idénticas e indistinguibles de las producidas de forma convencional.
La innovación en este ámbito puede suponer una herramienta fundamental para alcanzar los ambiciosos objetivos de sostenibilidad fijados por la Unión Europea, afirmó el secretario general de ANOVE.
Jorge Iglesias, gerente de la biotecnológica Rooteco, y Félix Martínez, también de Rooteco, fueron los encargados de explicar las innovaciones en el ámbito de la fertilización y la regeneración del suelo agrícola.
El gerente de Rooteco resaltó el papel de las nuevas herramientas con las que se trabaja en biotecnología. Son aparatos que nos ayudan a tener un conocimiento exhaustivo de una bacteria o de un hongo, y de las sustancias beneficiosas para la planta que exudan esas bacterias y esos hongos.
A base de microorganismos, Rooteco ha conseguido producir lo mismo reduciendo en un 10 % el aporte de agua, captar un 25 % más de nitrógeno con una bacteria y un 50 % del fósforo con otra.
Félix Martínez aportó la parte técnica y científica de la actividad de los microorganismos y sus relaciones con las plantas, mostrando algunos ejemplos de los estudios y ensayos de la compañía.
Conclusiones de la jornada
Fernando Burgaz, miembro del grupo de trabajo "Jóvenes ingenieros, emprendimiento e innovación" del Colegio, fue el encargado de presentar las conclusiones de la jornada:
La innovación forma parte de la transformación que la cadena agroalimentaria necesita para garantizar su desarrollo y sostenibilidad, señaló. La ingeniería agronómica como única profesión presente en todos los eslabones de la cadena de suministro tiene, y debe tener aún más, un papel relevante en el impulso de la innovación, añadió Burgaz.
La tecnología ligada a la mecanización agraria determina la sostenibilidad de las explotaciones y empresas agrarias, e igualmente condiciona, y condicionará, con más intensidad, las formas de trabajar, de producir y vender los productos obtenidos, así como la cuantía y calidad de los alimentos que llegarán a los consumidores.
Las nuevas técnicas de edición genética presentan un gran potencial para ayudar a cumplir los objetivos para la agricultura, en los ámbitos europeo y mundial, en tanto que ayudará a avanzar hacia una agricultura más resistente al cambio climático, que utilice menos recursos naturales como el agua y necesite menos productos fitosanitarios y fertilizantes, resaltó.
El suelo y su potencial productivo han sido muchas veces olvidados en los planes y programas de desarrollo de la agricultura. Los trabajos para la puesta en valor de los microorganismos del suelo están mostrando nuevas posibilidades para evitar la pérdida del capital que supone el suelo y para movilizar las reservas de nutrientes del suelo. El suelo está llamado a ser uno de los protagonistas de la agricultura en los próximos años, no solo por la puesta en valor de su microbiología, sino también por su potencial como almacenamiento de CO2 y su contribución para mitigar el cambio climático.
La jornada fue inaugurada por José Trigueros, presidente del Instituto de la Ingeniería de España quien reconoció la importancia del sector. El sector primario es fundamental, como hemos visto en el pasado reciente, y sin ninguna duda en el futuro, dado que la población va a seguir creciendo y tenemos que seguir abasteciéndola, comentó.
María Cruz Díaz, presidenta de Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos, reconoció que “los ingenieros agrónomos tenemos que volver a pensar cómo actuar, cómo mejorar, cómo modernizar y cómo entrar en este nuevo paradigma, sin olvidar lo que teníamos hasta ahora”.
Francisco González, decano del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Centro y Canarias destacó la actualidad de los temas tratados durante la jornada y el papel de los ingenieros agrónomos para aportar soluciones en base a su conocimiento. Los ingenieros agrónomos, por formación, somos capaces de intervenir en estos campos indistintamente. Lo que nos da fortaleza es nuestra diversidad de formación y nuestra posibilidad de ayudar al sector agrario, afirmó.
Puedes ver la jornada en diferido en el Canal de YouTube del Instituto de la Ingeniería de España:
